jueves, 7 de octubre de 2010

Sueños.

Óneira, sueños. De eso nos construimos, de eso estamos hechos; de hecho, venimos a este mundo a eso, a soñar y esos sueños hacerlos realidad.
Si me pagaran por cada sueño que he tenido, podría ser dueña del mundo entero.
Si me pagaran por cada desilucion, tendría una considerable suma de dinero.
Si me pagaran por cada sueño cumplido, puedo decir que viviría bien.
No me imagino mi vida sin sueños, creo que no tendría sentido. Una vez escuché una frase de el maestro Calamaro que decía: ¨Yo que soñaba despierto, ya no sueño dormido.¨
Soñar despierta, amo soñar despierta. Le da un giro aún mas interesante a la interesante prueba que es la vida.
Una persona que no sueña, entonces...de qué está hecho?
Una ilusión es diferente a un sueño. La ilusión es un arma de doble filo. Amo la sensación que produce ilusionarse, pero odio el frío que te causa el toparte con la realidad.
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